lunes, 28 de septiembre de 2009

Lo único constante es el cambio

Esta reconocida frase de Peter Senge resuena cada vez con mayor frecuencia en las organizaciones. Explosiones de la competitividad, inestabilidades económicas, modificaciones en la legislación, son algunos de los factores que impulsan a las empresas a transformarse para mantenerse “en carrera”.
La profundidad de los cambios puede ser diversa y depende de los factores que los origina. Sin embargo, más allá de su magnitud, se trata de una situación extremadamente compleja ya que generar cualquier variación en un detalle de la vida cotidiana acarrea dificultades e incomprensiones. Seguramente todos podemos recordar algún proceso de cambio acontecido en nuestra vida. Pensemos en cómo nos sentimos cuando dejamos la escuela secundaria y comenzamos a estudiar en la universidad, qué emociones nos invadieron cuando afrontamos nuestro primer día laboral, cuáles fueron las sensaciones que tuvimos al momento de cambiar de casa, barrio, pareja, trabajo...Si hurgamos en nuestros recuerdos seguramente descubriremos que todos estos acontecimientos guardan cierta semejanza: la transición vivida. Las etapas que se reconocen en dicha metamorfosis suelen ser:
1. Negación: Percepción de peligro, sentimiento de ansiedad, preferencia por quedarse en el pasado.
2. Defensa: Aferro a costumbres y tradiciones evitando la realidad, reacción de apatía o ira.
3. Aceptación: Sentimiento de impotencia para impedir el cambio sin embargo, comienzan a buscarse soluciones y desarrollarse nuevas habilidades.
4. Adaptación o asimilación: Institucionalización del cambio.
Las instancias mencionadas se replican en cada uno de los procesos de cambio que acontecen en el ambiente laboral. El éxito de los mismos está estrechamente ligado a la forma en que se inicien y desarrollen por ello, debemos recordar que la transición no debe eludirse y la “llegada a la meta” depende, en última instancia, de la preparación de las personas, del grado en que sean proclives al cambio, de sus capacidades de descongelamiento y, sobre todo, de la profesionalidad de los miembros del área de Recursos Humanos, quiénes jugarán un papel central en la explicación, asimilación y predicación del mismo.

Mariana Urbancic (*)

(*) Licenciada en Relaciones del Trabajo de la Universidad de Buenos Aires.

Podrás encontrar información relacionada al Change Management en:
http://www.ideared.org/revista/articulo.asp?revista=25&codigo=145

Cuestión de Principios

Tuve el placer de ver la película que lleva el título de esta nota, estrenada el pasado jueves y guionada por el Rosarino Fontanarrosa. Además de ratificar la simpleza con la que el negro nos introduce en las profundidades de la vida, pude repensar una vez más ¿Qué son los principios? ¿Para qué sirven? ¿Donde están?Es conmovedora la escena donde Adalberto Castilla (un antigüo empleado de la organización) le dice a Silva (un joven yupi nombrado recientemente Gerente General) “No todo tiene un precio Sr. Silva”, refiriéndose a la revista “Tertulias” Nro. 48 que era la única que le faltaba a Silva para completar su colección y estaba en manos de Castilla, quien la conservaba hace muchos años y con gran afecto porque dentro de ella había sido fotografiado su padre.Es bajo esta trama que Silva empieza a manipular a Castilla mediante diferentes mecanismos que su figura de poder le permitía emplear. Es aquí donde Sarita, la mujer de Castilla se ve presionada e ilusionada por el dinero ofrecido y trata de convencer a su marido para que acepte esa suma de dinero que Silva estaba dispuesto a ofrecer por ese ejemplar de Tertulias.
Cuantos disparadores nos producen estas escenas. Pensar que muchas veces nos encontramos en las Organizaciones de las cuales formamos parte con muchos “Silva´s”, personajes que están dispuestos a llegar a la meta sin importarles el camino que deben transitar. Personas que usan su poder manipulando las necesidades básicas de aquellos individuos que las tienen o abusándose de aquellos que fantasean con las ilusiones que la sociedad de consumo insertó en sus mentes.
Ahora si, permítanme disentir con Castilla y decirle que los principios no son un asunto generacional. No podemos decir que antes la sociedad tenía valores y ahora no los tiene, si fuera así: La corrupción sería algo que surgió en los últimos años, la traición un concepto nuevo y la ética un concepto que ninguno de los jóvenes conocería su significado.
Los valores o principios no desaparecen. Es verdad que a través del pasar del tiempo estos van mutando, pero me permito reformular un dicho popular “hay y hubo de todo en todos lados, épocas y lugares”.
Ahora bien, retomemos la simpleza que nos propone “el negro” y porque en lugar de hacer tanto hincapié en Responsabilidad Social Empresaria o Desarrollo Sustentable hablamos primero de principios. No tengo dudas que será un proceso más transparente, con mejores resultados y donde todos sabremos de que estamos hablando.

Ariel Vazquez (*)

(*) Licenciado en Relaciones del Trabajo de la Universidad de Buenos Aires.

lunes, 21 de septiembre de 2009

La Reflexión en la Acción

Vivimos en un mundo donde la acción es ponderada y el resultado de esa acción es el finalmente buscado.
Nos planteamos y nos proponen objetivos a corto, mediano y largo plazo. ¿Que hay que hacer y hacía donde vamos? ¿Para qué? ¿Con que fin? Son preguntas que no siempre podemos hacernos ni hacer. Los tiempos establecidos van adelante. “El tiempo es tirano.” “Los tiempos apremian”.
En este contexto donde estamos todos inmersos, algunos más y otros menos, se hace difícil pensar en un momento de reflexión. Encontrar un tiempo donde detenernos a pensar es un desafío. Corremos a un ritmo donde es casi imposible proponer una espera, permitirnos una parada. No hay tiempo para esto.
¿Qué es contar con un lugar de reflexión? ¿Qué cosas hacemos cuando reflexionamos? ¿Será que nunca lo hacemos?
Yo creo que muchas veces reflexionamos, sin saber que lo estamos haciendo. Puede que solos sin compartirlo, pero lo estamos ejercitando.
Cuando hablamos con amigos, con compañeros de trabajo, con nuestra familia o nuestra pareja y les contamos algo que nos pasó. Cuando una situación nos deja pensando, nos llama la atención, y nos convoca. Ciertas veces escuchamos un diálogo completamente ajeno y nos damos cuenta que algo tiene que ver con nosotros y lo llevamos a nuestra realidad. Muchas veces cuando escuchamos música estamos reflexionando, a veces hasta elegimos el estilo que necesitamos, justamente para que nos traslade a otro lugar diferente al que en ese momento estamos. Con alguna letra nos vamos y nos dejamos llevar por el ritmo para imaginar y reflexionar.
Cuando nos reconocen un buen resultado, lo vivimos cómo un logro, a veces solo lo disfrutamos, pero también podemos pensar que nos permitió alcanzarlo.
En todos estos momentos estamos de una u otra manera reflexionando, con nosotros mismos o tal vez con otros.
Creo que es interesante poder dar más lugar a esta habilidad que todos tenemos, llevándola a un lugar cómo es nuestro trabajo. Si bien repensar o reflexionar no siempre nos va a llevar a resultados cortoplacistas y tangibles nos va a permitir principalmente ser más dueños de lo que pensamos, de lo que sentimos y nos pasa. En definitiva no es mas ni menos que ponerle palabra a lo que pensamos, nos va a permitir generar cambios sobre nosotros mismos y por consiguiente el contexto también va a cambiar.
Creo en la posibilidad de la reflexión en la acción. Antes, durante y luego de la acción es posible reflexionar.
Pensar que este acto puede ser también en forma conjunta, que más allá de creer en la importancia de la auto reflexión, de esa reflexión interna, la de cada uno, la que cada uno hace de distinta manera y a distintos tiempos; una reflexión grupal me parece doblemente rica. Escuchar al otro para darnos cuenta que si somos únicos, pero no los únicos y que el mundo es más grande de lo que muchas veces nuestros ojos pueden permitirnos ver.

Lic. Cecilia I. Semar ( *)
(*) Licenciada en Psicología, Universidad de Buenos Aires.

¡Gung Ho! “Cómo aprovechar al máximo el potencial de las personas”

Hace algún tiempo tuve la oportunidad de leer un libro muy interesante escrito por Ken Blanchard y Sheldon Bowles. Gung Ho! relata la historia de cómo la Gerente General de Walton Works logra salvar a la empresa de una inminente quiebra. Para lograr semejante hazaña, la protagonista es ayudada por un mentor, quién le transmite la filosofía de Gung Ho!.
Gung Ho! es una filosofía de trabajo basada en ejemplos tomados de comportamientos de animales los cuales, aplicados al ámbito laboral, permite transformar el trabajo en una actividad motivadora, productiva y satisfactoria. Los elementos que la componen son: el espíritu de la ardilla, el estilo del castor y el don del ganso.
El espíritu de la ardilla: “Trabajo que vale la pena”
Si prestamos atención a las ardillas, podemos observar cómo trabajan arduamente en equipo. Constantemente las vemos en movimiento, corriendo y saltando de aquí para allá buscando alimento y llevándolo hacia su madriguera a fin de almacenarlo. El esfuerzo que realizan les permite sobrevivir en el invierno, con lo cual, es más que importante, vale la pena.
Las lecciones a aprender de la ardilla son:
· debemos valorar el trabajo que hacemos por el beneficio que significa para uno, para los suyos y para la sociedad en general,
· el trabajo debe llevar a una meta comprendida y compartida por todos,
· los valores deben orientar todos los planes, las decisiones y las actuaciones.
El estilo del castor: “Ejercer control sobre el cumplimiento de la meta”
Cuando observamos a los castores, podemos descubrir que trabajan cada uno a su estilo, sin esperar las órdenes de otro castor, haciendo uso de su buen criterio para construir las represas. Los castores se respetan entre sí: si alguno pone una rama en un lugar determinado o de una forma en particular, todos respetan esta decisión. Asimismo, no ocultan el árbol para que otros castores no lo usen: todos tienen el mismo acceso a los recursos para hacer su trabajo, lo cual incluye información precisa y actualizada.
Las lecciones a aprender del castor son:
· conocimiento de cada individuo sobre los valores (las reglas) y los planes (el marco de acción), para tornar clara su participación,
· autocontrol y responsabilidad individual para contribuir al logro de las metas colectivas,
· respeto por los sentimientos, pensamientos, decisiones y sueños de cada uno.
El don del ganso: “Alentar a los demás a seguir adelante”
Cuando observamos a los gansos volar, vemos que siempre lo hacen en grupo y de forma ruidosa. Ellos graznan no solo para comunicarse, sino para darse ánimo, para alentar a los demás a seguir esforzándose y volar seguros.
La lección a aprender del ganso es:
· importancia de las felicitaciones verdaderas por el trabajo bien realizado, lo que genera entusiasmo y motivación.
El libro demuestra, a través de una explicación sencilla y práctica, que es posible hacer que una organización funcione y que las personas que la componen sean felices con su trabajo, a través de acciones claras orientadas a:

- Hacer que el trabajo valga la pena
- Ejercer el control sobre el cumplimiento de la meta
- Alentar a los demás a seguir adelante
Mariana Urbancic (*)
(*) Licenciada en Relaciones del Trabajo de la Universidad de Buenos Aires

Mi Primer Empleo por Juan Ignacio Matas

Perfil del Entrevistado
Juan Ignacio Matas
27 años
Estudiante de Ingeniería Civil (UTN)
Coordinador de Sub-proyecto en ASTRA EVANGELISTA.


Creo no saber definir cuál fue el primero de todos aquellos. Aunque sería interesante contar por todos los lugares que pasé, a pesar del poco tiempo que estuve.
Mis comienzos fueron en donde algunos tienen la oportunidad: “la empresa del padre”. Comencé con la confección de planos en Autocad y planillas para el rubro de la construcción, siempre en horarios cómodos para poder estudiar. Luego, una cosa llevo a la otra y empecé a visitar las obras teniendo ya relación con los obreros, inspectores y otros, siempre con bajo perfil y tratando de aprender todo.
Al tiempo hice pasantías pagas por la FIUBA en tareas como censos, inspección edilicia de escuelas y jardines
La madurez quizás, me llevó a querer buscar un trabajo por mi cuenta y empecé la búsqueda a través del envío de curriculums, en sus comienzos bastante frustrada por cierto. Pasé por entrevistas de empresas de supervisión de ascensores, de matafuegos, constructoras y alguna otra que no recuerdo. Vale mencionar que a ninguna de ellas fui convencido de querer ingresar, lo cual se reflejo al momento de no recibir el llamado post-entrevista.
Hasta que un día, un amigo que en su momento trabajaba en una consultora me dijo: Están pidiendo estudiantes de ingeniería en una empresa constructora, tenés combis que te llevan y comedor en planta, ¿Querés ir? Le contesté: Si, probé tantas veces…decime cuando y que me van a preguntar (por dentro tenía la sensación de que iba a entrar, casi que estaba convencido).
Y como digo, si uno va convencido, sin duda que se nota y los resultados son siempre mejores.
Mis comienzos fueron en oficina, entrando a lo desconocido y siempre mostrando voluntad e interés de aprender. Conservando el respeto y la simpatía. Costó, aunque no tanto, y así pasé el primer año en ese sector, hasta que se dio la oportunidad de ir a obra (algo que yo esperaba ansiosamente). Las cosas empezaron a cambiar, el trabajo había cambiado, para mejor, y la curva de satisfacción en todos los aspectos era creciente. Hoy hace casi 4 años que estoy en la empresa, ya no físicamente en obra, pero si trabajando desde oficina para una de ellas.
Conociendo al personal y utilizando una psicología con cada uno de ellos para poder salir adelante con las tareas diarias. Tratando de esquivar todo aquello que perjudique mi futuro y replanteándome constantemente si será este mi lugar de trabajo. ¿Quién sabe? Pero de algo estoy seguro, si tuviera que volver a empezar, lo volvería a hacer porque a uno la experiencia no se la quita nadie.
Desde mi experiencia puedo aconsejarles lo siguiente: Cuando inicien su búsqueda no piensen solo en “empezar a trabajar”, tengan en cuenta su crecimiento profesional y sobre todas las cosas enfoquen en aquello que les gusta. Esto, los hará más ricos en conocimiento y les abrirá las puertas a nuevas posibilidades.


Juan Ignacio Matas

lunes, 14 de septiembre de 2009

Mi Primer Empleo por Norberto Semar

Perfil del Entrevistado
Norberto Semar
71 años
Ingeniero Químico (UBA)
Ex- CEO de Akzo Nobel para Argentina y Brasil

Había un Profesor de la materia Organización Industrial, en la Escuela Técnica Nro 3 de Barracas que era el Director de la Imprenta Fabril Financiera, que el último día de clases me pregunto si yo iba a trabajar. Le dije que si, entonces me envió a hacer algunas entrevistas y los exámenes para entrar a la Imprenta. Ingresé en el Laboratorio en el área de Control de Calidad. Primero hice lo que le llamaban la Escuelita de Artes Gráficas, estuve ahí capacitándome 3 meses más o menos. Luego vino un Técnico norteamericano para abrir una sección nueva y me propusieron trabajar al lado de él debido a que yo era el único que hablaba inglés en el laboratorio. Trabajaba de 6 a 14 y después me iba a la Facultad de Ingeniería.
Después de un año y medio tuve que dejar el trabajo para realizar el servicio militar, donde hice tareas administrativas, traducción de manuales, doblaje de películas, etc.
De acá en adelante, desde mi primer trabajo, nunca más paré de trabajar.
Ingresé a Alba donde trabajé durante 7 años, tuve la posibilidad de estudiar mucho porque tenía una biblioteca fabulosa y llegué a ser Jefe de Laboratorio. Luego desde la empresa Akzo Nobel me hicieron una propuesta laboral ya que les interesaba mi experiencia en acrílicos automotrices, auge en ese momento. En Akzo Nobel me desempeñé en diferentes áreas hasta llegar a ser CEO para Argentina y Brasil.
Pasé de ser un especialista técnico a ser Gerente General porque siempre busque tener una mirada general de las cosas, por mi personalidad. Iba ganando experiencia, aprendiendo, siempre miraba todas las áreas, hice cursos de finanzas, gerenciales, los pedí y recibí el apoyo. Lo importante para mi es que nunca me lo propuse, llego por decantación de la conducta que uno tuvo. Hoy no se si todavía es así, no se, tengo mis dudas.

Si tuviera que recomendar algo a aquellos que están buscando su primer Empleo les diría que busquen un Empleo que sea compatible, en la medida de lo posible, con los objetivos que tengan, lo que desean hacer en sus vidas. Yo por ejemplo prioricé los horarios y el lugar de trabajo para poder estudiar en la Facultad. Me fijaba también la importancia que iba a tener el área en la que yo iba a trabajar dentro de la Empresa. Por ejemplo el Laboratorio en la Imprenta no era importante, pero en Alba era el apéndice del negocio. En un primer Empleo, hay que buscar un lugar para ganar experiencia o para desarrollarse.

Quizás antes había más oportunidades laborales, mis compañeros de la Escuela Técnica y yo, a los pocos meses de egresar, estábamos todos trabajando. Había más posibilidades de crecer y desarrollarse dentro de una Empresa, las Compañías podían proyectar más, la Argentina estaba creciendo. A mi me ayudaron los cambios tecnológicos que se estaban produciendo en la Industria, particularmente la Automotriz. También me ayudó el conocimiento técnico con el idioma. Mi vieja y mi viejo desde su humildad de inmigrantes cómo eran, me impulsaron a estudiar Inglés siempre. Tuvieron la visión y eso me ayudo a diferenciarme, a relacionarme siempre con gente de afuera.
Norberto Semar

Mi Primer Empleo por Alejandro Balbinot

PERFIL DEL ENTREVISTADO
Alejandro Balbinot
26 años
Estudiante de Contador Público (UBA)
Analista de Créditos y cobranzas IMR S.A.

Cuando me preguntaron si quería realizar un post para lasrelacioneslaborales.blogspot.com, sobre mi primera experiencia laboral fueron varios los recuerdos que invadieron mi mente.
Recordé mis primeras experiencias en un comercio familiar, un trabajo totalmente informal pero que comenzaría a formar mi perfil profesional, ya a la temprana edad de 12 años. Vender lo que más se pudiera era el objetivo y ayudar a mi familia la finalidad.
Luego años más tardes vendrían mis primeras experiencias en el mercado del trabajo formal.
Los primeros currículos, las primeras entrevistas y luego finalmente mi primer trabajo bajo relación de dependencia.
Ya lejos de aquel temprano perfil comercial, comenzaba mi carrera profesional como muchos otros, haciendo tareas rutinarias, en un archivo ordenando documentación y saliendo de vez en cuando para hacer algunos trabajos de cadetería, trámites y pesados legajos ocupaban mi tiempo en aquellos días.
Recuerdo los nervios típicos de las primeras veces, el miedo a lo desconocido….
También a mis primeros compañeros de trabajo, eran 5 muchachos de no más de 22 años que estaban como yo comenzando su carrera profesional, todas las mañanas haríamos el parte de nuestras desventuras en un archivo repleto de expedientes.
En aquel momento la empresa era muy rígida. Con el pasar de los años vería como aquel lugar se fue adaptando a las diferentes realidades de nuestra sociedad…
Tal vez, lo importante a destacar una primera experiencia no reside en lo que se haga, ni donde lo hagamos… pues somos totalmente neófitos en el tema y es lógico que no seamos los mejores, y que muchas veces ni siquiera nos guste lo que estamos haciendo…
Lo importante es que arrancamos… Si!!!, nuestras carreras comenzaron, y eso marcará un antes y un después en nuestras vidas.
Al comenzar nuestra etapa laboral son muchos los factores que cambian en nuestras vidas, comenzamos a percibir una remuneración, nuestros gustos van cambiando, empezamos a interactuar con las personas y debemos insertarnos en la cultura organizacional del lugar donde trabajamos.
Finalmente, las primeras experiencias pasan por nuestras vidas, aquel momento de ansiedad queda en el olvido para dar lugar a nuevos desafíos, nuevos cargos y responsabilidades que llegan a nuestras vidas…
En la medida que avanzamos nos damos cuenta que la vida está plagada de primeras experiencias.

Alejandro Balbinot

Mi Primer Empleo

Hoy iniciamos esta sección donde encontrarán a diferentes generaciones contando sus primeras experiencias laborales. A través de estos relatos podremos leer distintas experiencias que serán un valioso aporte para todos los lectores. Seguramente les generará añoranzas a aquellos que ya se encuentran empleados y será una herramienta de gran utilidad para aquellos que están en la difícil búsqueda de su primer empleo.
Todos los que quieran compartir su experiencia será un placer recibirla en vazquezariel@argentina.com.

Bienvenida la Sección y las ideas !

El equipo de lasrelacioneslaborales.blogspot.com

El verdadero significado de la Responsabilidad Social Corporativa.

Habitualmente, cuando oímos que una empresa realiza donaciones o colabora con fundaciones que apoyan a persona desfavorecidas pensamos: “Esta es una organización socialmente responsable”. Sin embargo, la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) es un concepto mucho más profundo que la mera actividad filantrópica.

El Instituto Ethos de Empresas y Responsabilidad Social la explica como “Una forma de gestión que se define por la relación ética de la empresa con todos los públicos con los cuales ella se relaciona, y por el establecimiento de metas empresariales compatibles con el desarrollo sostenible de la sociedad; preservando recursos ambientales y culturales para las generaciones futuras, respetando la diversidad y promoviendo la reducción de las desigualdades sociales". En dicha definición descubrimos que, para que una organización sea considerada socialmente responsable, debe interactuar éticamente con:

-Los trabajadores, asegurando condiciones de trabajo seguras y saludables.
-Los clientes, ofreciendo productos o servicios que respondan a sus necesidades.
-Los proveedores, respetando los acuerdos definidos.
-Los accionistas, informando sobre las particularidades del negocio y generando dividendos sustanciales.
-La comunidad, creando fuentes de empleo y preservando el medio ambiente para las generaciones venideras.

La necesidad de un comportamiento ético en las empresas se ha convertido en una creciente preocupación en el mundo de los negocios. Los ejecutivos se han dado cuenta de que el comportamiento no ético puede resultar extremadamente costoso, a largo plazo, para la Compañía y para la sociedad. Es por ello que muchas organizaciones están asumiendo la RSC como un compromiso estratégico y auténtico, que define su propia cultura y sobre la cual se construyen sus estrategias y prácticas.

Lic. Mariana Urbancic (*)

(*) Licenciada en Relaciones del trabajo de la Universidad de Buenos Aires.

Si te interesa obtener más información acerca de este tema ingresá en http://www.iarse.org/

martes, 8 de septiembre de 2009

La importancia del Curriculum Vitae

A través del tiempo el Curriculum fue evolucionado y mutando en cuanto a sus formas de presentación, lejos han quedado los tiempos en los cuales se los diseñaba en una máquina de escribir. En la actualidad tanto la informática como Internet se muestran como herramientas principales para la elaboración del Curriculum Vitae. Podemos decir que hoy, para determinados puestos y en determinadas ocasiones, el CV escrito es solo una formalidad. Internet se ha desarrollado vertiginosamente y pasó a convertirse en la herramienta líder para la búsqueda de empleo. Hoy los portales de empleos logran posicionarse como la alternativa más económica y efectiva ante aquellas personas que publican y buscan ofertas de empleo. Como si esto fuera poco, la red de redes nos sigue sorprendiendo proporcionando otras herramientas como las redes sociales profesionales o Webs 2.0, donde uno puede registrarse y publicar sus antecedentes profesionales para ser buscados por colegas o empresas.

En este contexto no se debe desvalorizar la elaboración de un CV, por el contrario, debemos reafirmar que contar con un Curriculum Vitae estratégicamente diseñado y con una redacción correcta, sigue siendo una estrategia fundamental para la búsqueda de empleo. No debemos olvidar que el CV o el formulario que completemos en algún portal de empleos es el primer contacto y la posibilidad que tenemos de describir en forma escrita a las empresas u organismos, que requieren mano de obra, nuestro perfil. Nadie sabrá si tenemos el perfil requerido si no lo expresamos en forma clara.
Podemos concluir que un buen Curriculum Vitae nos permitirá completar de manera más rápida y ordenada la información que nos solicitan: los formularios en los portales de empleos, las redes sociales y blogs. Además, por sobre toda las cosas, será una puerta de entrada a que las empresas nos quieran conocer personalmente.

En el siguiente link encontrarán un modelo de Curriculum Vitae que podrán utilizar como referencia.
http://www.megaupload.com/?d=U6YGONEG

Ariel Vazquez (*)
(*) Licenciado en Relaciones del Trabajo de la Universidad de Buenos Aires.

martes, 1 de septiembre de 2009

Bienvenidos... ¿a donde?


Bienvenidos a las relaciones laborales, un mundo donde de alguna u otra forma todos participamos. ¿Qué son las Relaciones Laborales? Podemos definir las relaciones laborales como esa interacción existente entre el Estado, los Sindicatos, las Empresas y los Individuos donde se pone en juego el vínculo Capital – Trabajo.
Los seres humanos pasamos gran parte del día trabajando o buscando empleo, es ahí donde nos interrelacionamos con trabajadores, delegados gremiales, jefes y directivos. También las políticas de Estado en materia laboral nos afectan a todos. Estos hechos nos generan sentimientos de alegría y angustia, por lo que podemos decir que de acuerdo a como estén configuradas las relaciones laborales propias y del país podrán ser generadoras de alegría y angustia en nuestras vidas.Dada la relevancia que tienen las relaciones laborales en nuestras vidas es que surge la idea de crear este espacio de reflexión sobre las ciencias del trabajo. En este blog encontrarán artículos que tratarán de socializar inquietudes que buscarán generar el pensamiento crítico y la formulación de conclusiones independientes.

Invitamos a todos aquellos que estén interesados en publicar un artículo a enviarlo a vazquezariel@argentina.com. Todo aporte o idea contribuirá sin ninguna duda al desarrollo de este blog.

Estamos muy contentos de haber podido abrir este espacio y compartirlo con todas aquellas personas que lo lean.

El equipo de lasrelacioneslaborales.blogspot.com

Los programas de Jóvenes Profesionales o la Industria de las Ilusiones.

Seguramente alguna vez escuchamos de algún estudiante intermedio o recién recibido frases como “como me gustaría ingresar al programa de Jóvenes Profesionales de esta multinacional” “en esos programas te brindan un plan de desarrollo y podés poner en práctica todo lo estudiado en la universidad‘’… Así llega el día en que navegando por la web aquel universitario encuentra ese llamado tan ansiado por él, ese banner luminoso y colorido con la frase “queremos conocerte”, que titila como cualquier cartel fluorescente de Las Vegas. Luego de abalanzarse sobre él piensa que esa convocatoria fue escrita para su persona, que tiene la edad justa, que está en el momento de la carrera que solicitan, que es bilingüe tal cual se lo requieren y, demás está decir, que es un persona proactiva, flexible y más aún orientada a resultados. Es así que esa ilusión viaja a través del espacio cibernético hacia los destinos de alguna consultora especializada en los ‘’Recursos Humanos”.Pasan algunos días y ese teléfono no quiere sonar hasta que de repente un sonido da comienzo a lo que podrá ser la oportunidad de su vida, una voz se escucha que suena algo así como: “te llamamos de la consultora…podés hablar en este momento?”. La sonrisa que despliega no le permite contestar inmediatamente porque entre la finalización de la pregunta y el inicio de la respuesta se imagina quien lo está buscando y en su mente se dibuja en ese contexto tan anhelado.
Llega la entrevista individual, la entrevista grupal con su respectiva actuación, las evaluaciones psicotécnicas, las pruebas de inglés y por último si, viene la entrevista en la empresa que tanto había soñado.
Dos meses posteriores a la finalización de todo el proceso de entrevistas no se vislumbran novedades en la casa de este joven. Sus padres le preguntan casi todos los días y él no parece molestarse explícitamente pero desilusionado comienza a suponer: “yo sabía que cuando me hicieron actuar no estuve bien”… “seguramente dije cualquier cosa en el test de las manchas y la psicóloga lo interpretó”… “pero si llegué hasta la entrevista con quien sería mi jefe seguramente fue porque lo demás ya lo pasé, ¿será esta persona la que no me seleccionó? ”… “todavía no me avisaron que no quedé seleccionado, tengo que pensar en otra cosa y esperar la noticia, total me avisaron que me iban a llamar si era el elegido o no”… Agobiado de controlar la ansiedad decide tomar las riendas y llamar a la consultora responsable para averiguar si había quedado seleccionado o no pero después de memorizar la música del contestador, hacerse amigo de la recepcionista y llenarle la casilla de mensajes de voz a la persona que lo había llamado por primera vez sin encontrar respuesta alguna, esa ilusión que fue algún día, se transforma en una eterna incertidumbre.
Reflexión
¿Son los programas de Jóvenes Profesionales una fuente de reclutamiento de talentos o son meras acciones de marketing de las grandes compañías multinacionales? ¿Las empresas necesitan realizar un Programa de Jóvenes Profesionales todos los años o es solo un hábito que si lo dejan de hacer provocan una mala imagen hacía el contexto? ¿Estos Programas son impuestos por la política que diseña la casa matriz sin analizar las necesidades locales?
Es desafío de los profesionales que trabajamos con el factor humano en las empresas luchar para que se respete el propósito inicial de los Programas de Jóvenes Profesionales y se lleven a cabo con la seriedad que amerita. Nunca nos olvidemos que trabajamos con gente y que cada acción nuestra generará una reacción en ellos.

Ariel Vazquez (*)

(*) Licenciado en Relaciones del Trabajo de la Universidad de Buenos Aires.

Muestras artísticas, concursos fotográficos y talleres literarios integran la lista de acciones culturales de las empresas.

En un contexto variable y complejo, en el que muchas empresas no tienen perspectivas de crecimiento en el corto plazo, lograr entornos laborales competitivos depende, en buena medida, del desarrollo de aptitudes de los recursos humanos existentes. En ese sentido, algunas empresas incorporaron incentivos culturales dentro de sus políticas por considerar que fortalecen los pilares de su filosofía, optimizan el clima interno, potencian habilidades en sus empleados y fomentan la integración laboral y familiar.
“Las acciones culturales deben estar encuadradas en un marco de valores corporativos claros para que puedan ser creíbles y sustentables en el tiempo. Cuando están bien ideadas y gestionadas, trascienden la esfera laboral e impactan y fortalecen esencialmente los lazos entre la empresa, los empleados y sus familias”, opina Omar Gennari, gerente general de la consultora de investigación gerencial Great Place to Work Institute Argentina.
“Un factor importante es que este tipo de iniciativas sean inclusivas e integradoras. Las empresas deben analizar muy bien las características de su población total a la hora de crearlas para que su repercusión sea altamente satisfactoria y nadie quede excluido”, añade.
Aguas Danone organiza, en su empresa de aguas minerales Villavicencio, un concurso externo de fotografía junto a la Secretaría de Cultura de la Nación denominado “Cultura del Agua”. El propósito es invitar a reflexionar acerca de la importancia del agua como recurso vital y escaso. Como complemento, la compañía también realiza el concurso internamente para los empleados y sus familiares.
“De esta manera fomentamos que el personal y sus allegados expresen su creatividad y a la vez asuman como propio el compromiso que tiene la compañía de cuidar este recurso natural”, expresa Georgina Besozzi, gerente de Desarrollo Sustentable de Aguas Danone Argentina.
Los concursos premian tres obras, otorgan menciones honoríficas y seleccionan otras tomas para armar luego una muestra itinerante que recorrerá el país. Walmart también implementa desde 2006 concursos de fotografía internos. Además, dentro de su Plan Bienestar, organiza talleres literarios, torneos de pensamiento lateral y espacios de intercambio de hobbies y disciplinas artísticas.
Tal como promueve su lema corporativo “Vivir mejor”, el principal desafío del área de Recursos Humanos “es procurar una mejor calidad de vida integral en los ámbitos laboral, personal y familiar de nuestros `asociados’, que es como denominamos a nuestros empleados en todo el mundo”, afirma Ana Laura Delbarba, directora de Recursos Humanos de la empresa.
Asimismo, la firma cuenta con una biblioteca institucional y proporciona espacios especiales ­en su sede central y tiendas de todo el país­ para que el personal pueda expresar sus destrezas dentro del ámbito laboral. Un ejemplo es el de Verónica Miniello, empleada y estudiante de Bellas Artes, que ha montado una de sus obras en el muro del comedor de la sucursal de Avellaneda. “Hace tres años que estudio pintura en la escuela Manuel Belgrano, me apasiona y estoy muy agradecida por este espacio”, cuenta. En la misma línea, la empresa de software nacional Hexacta organiza concursos de fotografía de temáticas variadas para sus empleados, con la idea de compartir la mirada única de cada persona”, expresa Diego Vigliarolo, socio y responsable de Consultoría y Recursos Humanos.
Por otra parte, la compañía impulsa la lectura a través de dos vías: organiza mensualmente una Feria del Libro en la que los empleados pueden comprar todo tipo de ejemplares con muy buenos descuentos y regala un texto a cada integrante el día de su cumpleaños, según su perfil. Ambas prácticas las lleva adelante mediante un acuerdo que realizó con la compañía especializada en planeamiento y marketing cultural, Art Empresa. Otra de las iniciativas son las clases de teatro extra laborales en una sala especial. “También organizamos salidas de integración recreativas. Todas estas acciones generan compromiso, credibilidad y orgullo en las nuevas generaciones porque tenemos en cuenta sus intereses y creamos espacios de valor para su desarrollo personal”, completa el directivo. Por otra parte, la compañía de pinturas Tersuave también cuenta con bibliotecas institucionales en todas sus sedes del país, que se van ampliando mediante aportes mixtos: por cada libro que aporta un empleado, la empresa compra otro. A su vez, organiza múltiples actividades culturales y visitas guiadas mediante convenios con instituciones de cada ciudad en las que está presente, “con el objetivo de promover el arte, detectar y destacar aptitudes en el personal y fomentar su integración y recreación tanto laboral como familiar”, explica Jorge Polo, gerente de Marketing de la firma.


Fuente: Clarin

Una entrevista poco convencional.

Muy probablemente alguna vez tuviste una entrevista laboral, cuando llegaste encontraste que era una entrevista grupal y como si esto fuera poco te hicieron sentar alrededor de una mesa junto a los otros postulantes para resolver consignas mientras más de una persona te estaba observando.
¿De qué se trata esto?
Existe una técnica llamada Assessment Center que consiste en una evaluación estandarizada del comportamiento, basada en múltiples estímulos donde varios observadores, consultores y técnicos, especialmente entrenados, participan de esta evaluación y son los encargados de efectuar la observación y de registrar los comportamientos de los participantes. Los juicios que formulan los observadores/consultores los realizan principalmente a partir de actividades de simulación donde se intenta medir aquellas características de comportamiento que son vitales para desempeñar efectivamente las posiciones que se están requiriendo.
Está metodología tiene sus antecedentes a mediados del Siglo XX siendo utilizada en muchos casos por los ejércitos para reclutar los oficiales más eficientes. Posteriormente las empresas adoptan está técnicas con el fin de restarle subjetividad a las evaluaciones del comportamiento del personal actual y futuro. Es en este sentido que las empresas comienzan a utilizar los Assessment Center para Selección de Personal y Evaluaciones de Potencial. Es muy común el uso de este sistema para perfiles de Jóvenes Profesionales, perfiles comerciales, ingresos masivos de personal y mandos medios.
Si bien esta técnica tiñe de objetividad las evaluaciones del comportamiento y esto la hace ser de gran utilidad debemos destacar que realizar un proceso de Assessment Center presenta varias dificultades, entre ellas podemos destacar: Altos costos, se necesita contar con personal idóneo para llevarlo a cabo, los evaluadores deben estar entrenados de excelente forma y no debemos olvidar que las simulaciones son solo aproximaciones de la realidad.

Ariel Vazquez (*)


(*) Licenciado en Relaciones del Trabajo de la Universidad de Buenos Aires.(**) Si te interesa obtener más información acerca de este tema podrás ingresar a
http://www.hacienda.go.cr/centro/datos/Articulo/Dise%C3%B1o%20de%20un%20assesment%20Center.doc.